Hemos salido de Lora del Río pasadas las 8:00 de la mañana desde la Alameda del Tren. Empezamos a andar al final de la barriada de San Fernando en Villanueva del Río y Minas, sobre las 9:10; luego hemos llegado a lo que queda de la antigua estación de Arenillas, en la bifurcación hacia las ruinas romanas de Munigua, y ahí hemos cogido el sendero hacia El Pedroso, que va paralelo a la vía del tren.
El día está muy abierto, mucho sol. Aproximadamente a las 12:15 de la mañana, ya me he quitado prácticamente la ropa, me he quedado con una camiseta de mangas largas porque hace calor, y todavía nos queda bastante para llegar al Pedroso. Estamos por una zona de alcornocales, con ganado pastando: vacas, cerdos, ovejas... La verdad es que el día es bastante agradable. Cuando empezamos a andar hacía 5ºC y a las 12:30 ya hemos llegado a los 15º.
En la entrada a la localidad de El Pedroso, hemos parado para reagruparnos y tras cruzas las vías del tren nos fuimos a Casa Arias, donde nos dieron un menú del peregrino, con varios primeros y segundos a elegir. Yo pedí sopa de picadillo y lomo al whisky, con sus cervezas y el café (16'50€). Lo pasamos muy bien en la comida, coincidimos en Casa Arias con otro grupo de senderistas que estaban por la zona.
Después nos fuimos a ver la Iglesia de Nuestra Señora de la Consolación, en la Plaza de la Constitución. Aquí sellamos las credenciales y contemplamos su riqueza artística. Aproximadamente sobre las 17:30 cogimos el autobús de vuelta para casa. De nuevo, una jornada estupenda de ruta con los amigos del Camino de la Frontera.
|
Descanso y reagrupamiento sobre la mitad del camino |
|
Casa Arias |
|
Acogida en la Iglesia de Nuestra Señora de la Consolación
| Tuvimos una calurosa acogida por el párroco, sellamos las credenciales y nos presentó todo el patrimonio de esta Iglesia. |
|
|
Altar mayor, con el precioso retablo construido en el siglo XVIII por Bartolomé García de Santiago, que alberga la imagen de la Inmaculada Concepción de Juan Martínez Montañés. |
|
Retablo del siglo XVIII que sirve de marco al Cristo del Buen Fin, obra del escultor Pedro Millán, fechado a principios del siglo XVI |
No hay comentarios:
Publicar un comentario